Realiza los pequeños actos con amor

Santa Teresa de Lisieux (1873-1897) fue una monja carmelita francesa que vivió solo 24 años, desconocida del mundo en general, pero sus escritos afectaron a miles. Su enfoque era sencillo: realizar los actos más pequeños con amor. Ella subrayó: “Si una pequeña flor pudiera hablar, me parece a mí que nos diría simplemente todo lo que Dios hizo por ella, sin esconder ninguno de sus dones. No diría, bajo el pretexto de la humildad, que no era hermosa, o que no tenía un aroma dulce, o que el sol había marchitado sus pétalos o que la tormenta había dañado su tallo…” También escribió: “Si cada pequeña flor quisiera ser una rosa, la primavera perdería su hermosura”.