top of page

Un espacio de reflexión y crecimiento personal

El cuervo del descontento


Una fábula persa cuenta de una gallina, un ratón y un conejo que vivían juntos en una casita en el bosque, y compartían sus tareas en armonía. La gallina reunía la leña, el ratón traía el agua del arroyo y el conejo cocinaba las comidas.

Un día cuando la gallina estaba recolectando leña, se acercó un cuervo y le preguntó qué estaba haciendo. Al conocer cómo se repartían las tareas los tres compañeros, el cuervo exclamó: “¡No es justo! ¡Tú eres quien está haciendo la tarea más pesada y difícil! El conejo y el ratón se están aprovechando de ti.”

La gallina volvió pensativa a la casa, y al llegar, gritó al ratón y al conejo: “¡No es justo! ¡Hago las tareas más difíciles! ¡No voy a recoger más la leña!”

El descontento de la gallina contagió al ratón y al conejo, y comenzó cada uno a enojarse diciendo que hacían la tarea más difícil, y que no la harían más tampoco. Los tres pelearon hasta decidir lo siguiente: el conejo recogería la leña, la gallina traería el agua, y el ratón cocinaría.

Al ir al bosque a buscar la leña, un zorro atrapó al conejo y se lo comió. La gallina puso el balde en el arroyo para cargar agua, y la corriente arrastró el balde y a la gallina. El ratón, al estar cocinando la olla de sopa, se cayó adentro y se quemó.

El descontento puede robarnos la alegría y amargarnos.

Hebreos 13:5 NVI “Manténganse libres del amor al dinero, y conténtense con lo que tienen, porque Dios ha dicho: «Nunca te dejaré; jamás te abandonaré»”.

Aprendamos a agradecer y valorar cada día. Y a espantar a los cuervos (esos pensamientos de descontento) que quieren robarnos el presente.

Posts Destacados
Posts Recientes
Buscar por etiquetas
Síguenos
  • Facebook Classic
  • Twitter Classic
  • Google Classic
bottom of page