¿Disciplina o postergación?

"Todos sufriremos de dos tipos de dolor: el dolor de la disciplina y el dolor del remordimiento. La disciplina pesa gramos mientras que el arrepentimiento pesa toneladas" escribió el empresario y autorJim Rohn.

Cada día elegimos dos caminos, el camino más fácil de la postergación o la indiferencia, o el camino de la disciplina, de seguir adelante hacia nuestras tareas, objetivos y responsabilidades sin bajar los brazos.

La auto-disciplina es el camino más difícil, pero lleva a mejor puerto. La comodidad, la indiferencia, el “otro día lo hago” es demasiado fácil...pero no avanza ni progresa.

La auto-disciplina es hacer lo que tienes que hacer, lo sientas o no. Significa limitarte, ponerte freno, examinarte y seguir productivo a pesar de las emociones traicioneras.

En tu disciplina cumplirás con tus tareas: serás el mejor cónyuge posible, el mejor padre o madre, el mejor amigo, el mejor emprendedor, cuidarás tu descanso, alimentación y salud, persistirás en tus proyectos y avances.

Pero la disciplina es dolorosa, por lo cual es tan fácil abandonar y quedarse en el camino. La disciplina implica sacrificio y esfuerzo. Pero siempre vale la pena.

La auto-disciplina es como un músculo, hay que entrenarlo y esforzarlo.

No significa que no te tomes tiempos de descanso, de no volver a examinar tu vida. Sí, hay que pausar y evaluar. Pero recuerda, es mejor la disciplina que el remordimiento de no haber intentado avanzar. Así que vuelve a ponerte en marcha.

"Al leer sobre las vidas de los grandes hombres, descubrí que la primera victoria que ellos tuvieron fue sobre sí mismos. La autodisciplina siempre fue lo principal." Harry S. Truman

Te esperan grandes cosas… detrás de tu disciplina personal. ¡Adelante!