Cálmate en tiempos de crisis
Unos breves consejos que todos ya conocemos, pero necesitamos reafirmar:
En estos tiempos de pandemia necesitamos calmarnos y reprogramarnos, en lugar de permitir que la ansiedad y el temor nos sobrepasen.
La tarea de tu cerebro es tu sobrevivencia, lo cual no colabora con la calma. Tu cerebro trabaja incesantemente buscando los peligros y los riesgos, y se alimenta de las inseguridades, de las cuales una es la pandemia actual que está provocando no solo enfermedades y muertes, sino miedos desbordados. Lo que puedes hacer para darle algo de tranquilidad a este cerebro tan activo, es buscar controlar lo que puedes controlar. Comienza poniendo límites a tus pensamientos catastróficos y exagerados. Es bueno estar informado, pero el exceso sin fin de noticias y comunicaciones sociales alimenta la ansiedad. El secreto es mantener un equilibrio: tener la suficiente y necesaria información pero no excederse en las redes sociales. Elige la información útil y necesaria apropiada a la realidad.
Mantén tus rutinas y tu orden personal, familiar y laboral. (Muchas actividades hoy están suspendidas o limitadas por la pandemia). Cuida tu tiempo de descanso, mantén tus responsabilidades, pero toma tiempo extra para disfrutar del relajamiento, de una actividad placentera en familia, y buen descanso. Toma tiempo para ejercitarte, caminar, correr…
Mantén una actitud solidaria. No solo es tiempo para que te cuides, sino para que estés atento para considerar a otros. Comunícate con tus seres queridos, tus amigos, tus conocidos, con una palabra de aliento y esperanza, aunque sea por el Internet y las redes. (De paso, esto también tranquilizará a tu cerebro). Toma tiempo al levantarte a la mañana y al dormir por la noche de escribir una lista de las cosas por las cuales estás agradecido. (El cerebro automáticamente se enfoca en lo negativo, así que hace falta práctica y esfuerzo guiar los pensamientos a mejores puertos).
Ten en cuenta que no solo tienes que alimentarte bien, sino que tienes que “alimentar” bien tu cerebro con buenos pensamientos, ya que la ansiedad y los miedos disparan problemas de salud y pueden bajar las defensas del cuerpo. La oración, la respiración profunda y la reflexión pueden disminuir tu ansiedad. Toma tiempo para sonreír y reír, ya que te relaja, y produce bienestar. Vuelve a jugar buenos juegos de mesa, que te harán disfrutar del tiempo en familia, y que despejará tu cansancio y te renovará. Escucha música y lee buenos libros. (Hoy por la pandemia, hay ofrecimientos de eventos culturales, libros, música, viajes, todos por Internet).
Respira hondo, y practica la vida interior espiritual. Ora, reza, comunícate con Dios. Los tiempos de pandemia pasarán, pero el mundo seguirá complicado y necesitarás claridad y sabiduría para los días por delante.
