Manos a la obra

Una gran cantidad de nuestros problemas surgen cuando nos sentimos incapaces de tomar acción, o cuando creemos que las cosas “escapan” a nuestras manos. Dejamos que las cosas sigan su curso sin nuestra intervención, y no ponemos “manos a la obra” para trabajar en cambiar o mejorar las cosas.

Según el escritor Peter Shepherd, debemos comenzar con la palabra “poder”.

¿Qué significa? Él escribe lo siguiente:

Poder = responsabilidad + decisión.

Cuanta mayor decisión (elección) tengamos, mayor es nuestra capacidad de poder cambiar algo. El problema muchas veces significa que queremos el poder del cambio sin asumir nuestra responsabilidad y nuestras decisiones. Muchas veces esquivamos la responsabilidad, evitamos las decisiones, y por lo tanto... quedamos sin el poder de actuar, de hacer, de definir. Es decir, si queremos aumentar nuestra capacidad de poder hacer o ser, debemos aumentar nuestra percepción de las decisiones que tenemos a nuestro alrededor.

Ejercicio: Escribe una lista de las cosas de las cuales sientes que puedes hacer poco y nada al respecto. Luego pregúntate, ¿Qué cosas que rodean este problema sí significan una elección de mi parte? Haz la lista tan completa como te sea posible, para poder así analizar en qué cosas has renunciado a tu responsabilidad y por lo tanto, a tu capacidad de decidir, o de hacer algo al respecto.

Es importante que en tu corazón creas que Dios te da la capacidad de ver, de actuar, de asumir responsabilidad... y avanzar hacia el potencial de tu vida. Pero solo lo podremos hacer cuando asumimos nuestro poder de decisión en lo que podemos actuar, y aceptamos lo que no podemos cambiar. Muchas veces, por ejemplo, cuando recibimos una invitación a la que no queremos ir, decimos “No puedo ir” en lugar de “No quiero ir”, y así en nuestras vidas, decimos “No puedo” cuando quizás en realidad el pensamiento es “No quiero”. Por eso es muy importante que alinees lo que realmente deseas con tu conducta.

Escribe a continuación una lista de todas las cosas que quisieras que fueran diferentes en tu vida, y luego reflexiona y escribe al lado, ¿Qué cambios o decisiones puedo hacer en cada punto para revertir las cosas? Seguramente descubrirás que en cada caso, sí hay algo precioso y valioso que puedes hacer... ¡pero es necesario asumir responsabilidad y tomar decisiones!